Nace el 11 de Julio de 1865 en Pola de Lena (Asturias-España), ordenándose como Sacerdote Dominico en Santander en 1890. Sería destinado al Convento de Valladolid, donde desarrolla una intensa labor como predicador y director de la Academia Santo Tomás. En 1906, contando ya con 40 años, se incorpora a las Misiones amazónicas del Perú, convirtiéndose en uno de los principales organizadores de los puestos misionales existentes. Fundó tres misiones: San Luis del Manu (1908), San Jacinto de Puerto Maldonado (1910) y San José de Koribeni (1918).
Como misionero destaca por su labor de exploración de los más apartados rincones de la selva de Madre de Dios, realizando importantes expediciones por sus principales ríos como el Manu, Las Piedras, Purús y Bajo Madre de Dios. Igualmente, expresa una fuerte defensa de los derechos indígenas, en ese momento totalmente masacrados por la extracción del caucho, que aún se mantenía vigente. Prueba escrita de ello es el llamado «Un Documento Revelador».
Su aporte científico es enorme, escribiendo artículos sobre geografía, historia, etnografía y, especialmente, lingüística, área en la que publica tres vocabularios y una gramática.
Muere en Quillabamba en 1938. Pío Aza fue condecorado con la Medalla de Oro centenario de la Fundación de Lima por sus trabajos etno-filológicos y formó parte como miembro activo de la Sociedad Geográfica de Lima.