A través de una exposición virtual, el colectivo ‘Etochime Harakbut’, integrado por artistas hombres y mujeres de distintas edades de Madre de Dios, mostró al mundo su propuesta denominada "Los hijos del bosque", que persigue el rescate y la preservación cultural e identitaria, mediante la reflexión colectiva y la pintura.
“Mis abuelos cuentan que, antiguamente, ellos estaban en conexión con el bosque. Y una de las formas de conectar con el bosque era la pintura Arakbut. Esas líneas con el tiempo se han ido perdiendo… Entonces, me hice una pregunta: ¿cómo podíamos rescatarlas? Cada línea expresa sabiduría, nos hace recordar que somos hijos del bosque, nos da un bagaje de conocimientos que nunca debemos olvidar porque es la herencia de nuestros abuelos”. La exposición artística denominada “Los hijos del Bosque”, presentada el jueves 21 de octubre por el colectivo ‘Etochime Harakbut’, en palabras de una de sus miembros, Yésica Patiachi, busca transmitir la historia, los saberes y la cultura de este pueblo indígena al mundo, para así evitar su desaparición.
El evento fue transmitido por el Facebook Live de Radio Madre de Dios, el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP) y el Museo Etnográfico Amazónico, y reunió a un grupo de artistas Arakbut de diferentes edades de la región Madre de Dios. El encuentro, realizado en Puerto Maldonado, contó con los comentarios de la propia Yésica Patiachi, así como de Luis Tayori, ambos impulsores del colectivo artístico. También participaron la misionera dominica Hna. Zully Rojas, quien viene apoyando y respaldando de cerca esta iniciativa desde sus inicios, así como María Eugenia Yllia, historiadora del Arte y museóloga.
Los artistas, que pertenecen a la comunidad nativa Puerto Luz y Shintuya, regresan con esta exposición para el tercer aniversario del colectivo con la intención de retomarlo para seguir mostrándole a la ciudad lo desconocido de su cultura. “Quiero que disfruten nuestro arte Arakbut, nuestra cosmovisión, nuestra historia, y que esta historia transcienda a muchas personas, así como el mensaje que queremos dar (…) Agradecer una vez más por el espacio que venimos impulsando para que los jóvenes sigan teniendo esa conexión desde la zona urbana hacia los territorios”, resaltó Luis Tayori en su presentación.
Para la historiadora del Arte, María Eugenia Yllia, la reflexión que deja esta exposición es el interés de pintar para no olvidar, y para poder visibilizar aquello que durante mucho tiempo no ha podido hacerse conocido. “Etochime Harakbut nos muestra una serie de iniciativas y, en realidad, este es un paso más de una larga lista de esfuerzos colectivos en los que cada uno de los artistas, desde sus propias miradas, sus propias generaciones, han buscado traer la memoria y hacer lo posible porque ello no se pierda, principalmente para que los más jóvenes no olviden”.
Por otro lado, la Hna. Zully Rojas recordó la visita del Papa Francisco a Puerto Maldonado en 2018, cuando felicitó a aquellos que, por medio de la pintura y literatura, muestran al mundo su cosmovisión. Resaltó que el sumo pontífice considera necesario que los pueblos originarios sean quienes se autodefinen y muestran su identidad para poder escucharles. "Este es un paso del gran sueño. En distintos momentos hemos compartido que este proyecto tiene que seguir haciéndose realidad. Por eso hablamos de una muestra de más cuadros, y de la posibilidad de una escuela de teatro, de una escuela de pintura para hijos de familias indígenas en la ciudad. Dentro de este sueño es que queremos seguir caminando juntos y juntas, haciéndolo realidad".
Los hijos del bosque
El título de esta muestra artística está inspirado en el árbol de Aname, que, según cuentan los abuelos Arakbut, salvó a todos de la catástrofe y les hizo entender que se debe vivir en equilibrio y armonía con la naturaleza, tomando lo necesario, pero sin depredar a gran escala. Esta idea también la transmite Yésica Patiachi a través de sus cuadros. “El mensaje es resistencia, historia, conocimiento ancestral, reivindicar a los ancianos, rescatar nuestra mitología, cosmovisión… Es decirle al mundo que nosotros tenemos una forma distinta de ver el bosque. Somos hijos de Aname y también somos guardianes del bosque y lo seguiremos siendo”.
En palabras de Percy Tayori, este tipo de pintura nace de la necesidad que de los pueblos originarios de difundir su cultura a las civilizaciones modernas. Para él, la Amazonía es una despensa de riquezas que incluye a los pueblos originarios. “Mi cultura Arakbut expresa lo que significa la iconografía, las pinturas corporales, la historia y el origen como pueblo originario, mitos, guerras, cuentos, alegría, liderazgo. Mi mayor inspiración es relatar, describir lo que significa y lo maravilloso que es de riquezas, de conocimientos ancestrales, lo concerniente a la cultura indígena”.
A continuación, mira el vídeo de la exposición virtual "Los hijos del bosque":