Más de 90 misioneros provenientes de los ocho vicariatos de la Amazonía del Perú se reúnen del 23 al 24 de enero en la ciudad de Lima, con el fin de reflexionar y profundizar sobre la articulación pastoral intervicarial y trazar, con más fuerza que nunca, los nuevos caminos de la Iglesia amazónica.
Después de tres años sin poder verse ni compartir cara a cara debido a la pandemia, más de 90 misioneros provenientes de los ocho vicariatos que conforman la Amazonía peruana se volvieron a encontrar en un espacio impregnado de aprendizaje, escucha y diálogo. Bajo el lema de este año, “A la luz del Sínodo Amazónico”, el objetivo de este encuentro es reflexionar y profundizar sobre la articulación pastoral entre los vicariatos en perspectiva sinodal y panamazónica; para así continuar con el camino abierto por el Papa Francisco hace cuatro años.
El Encuentro de Misioneros de la Amazonía peruana se desarrolla del 23 al 24 de enero en la ciudad de Lima, con la participación de misioneros, religiosos, laicos e indígenas provenientes de regiones como Madre de Dios, Ucayali, Loreto, Amazonas, Cajamarca, Junín, y Cusco. Muchos de ellos tuvieron que viajar durante días desde las zonas más recónditas de la Amazonía, incluso a pie, para poder atravesar los bloqueos de vías que hay al interior de todo el país debido a la crisis política y social.
Además de los obispos de los vicariatos de la Amazonía, el Cardenal Pedro Barreto, presidente de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA); Mons. Rafael Cob, presidente de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM), Mons. Alfredo Vizcarra, presidente del CAAAP, y el consejero de la Nunciatura Apostólica del Perú, Mons. Ratislav Zummer, estuvieron presentes en la inauguración de este diálogo. No podían faltar los representantes de los pueblos indígenas como el Achuar, Awajún, Matsigenka, Harakbut, Asháninka y Shipibo-konibo, entre otros.
Con más fuerza que nunca
La pandemia de la COVID-19, si bien trajo dolor a millones de familias, logró acercar y unir a las personas en la virtualidad, y constituyó una oportunidad para retomar el proceso sinodal. De acuerdo al Padre Diego Clavijo, misionero salesiano del Vicariato de Yurimaguas, en la frontera entre Perú y Ecuador, este impulso fue suficiente para darles la fuerza para continuar en la búsqueda de un cambio en la Iglesia. “Hace varios años, salesianos mayores y jóvenes vivíamos de la utopía de un cambio, de una Iglesia diferente, de un mundo que puede ser mejor (…) en especial para los pueblos indígenas (…) Esta es la oportunidad de retomar esa utopía”.
Para Pati Blasco, religiosa de la Compañía Misionera del Sagrado Corazón de Jesús perteneciente al Vicariato de Jaén, esta pausa de dos años ha favorecido también la integración de la población urbana y campesina, quienes también apuestan por el cuidado de la Amazonía y la Casa Común, a fin de buscar un camino y una pastoral en conjunto. “Necesitamos unirnos y cada vez más y escucharnos, porque el problema de la Amazonía no solo incumbe a los pueblos amazónicos. Todos somos amazónicos y tenemos sangre indígena”.
El Encuentro de Misioneros de la Amazonía peruana es organizado por el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP), la REPAM Perú, el Centro Nacional Misionero (CENAMIS) y la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA).