En el Estrecho, zona de frontera entre Perú y Colombia, se desarrolla un proyecto para promover encuentros entre jóvenes, mujeres y ancianos que busca fomentar el liderazgo, el diálogo intergeneracional y la revalorización de sus identidades étnicas.
En la región más grande de la Amazonía peruana, donde confluyen la diversidad cultural y el aislamiento geográfico, el internado Angélica del Niño Jesús y la parroquia San Antonio del Estrecho impulsan un proyecto que fortalece las raíces culturales de las comunidades nativas. Esta iniciativa, nacida durante la pandemia, en 2020, busca fomentar la interculturalidad y el empoderamiento de las mujeres nativas, promoviendo espacios de encuentro que conecten a diferentes generaciones y etnias.
El proyecto que se lleva a cabo en la capital de la provincia del Putumayo, en Loreto, se centra en la creación de encuentros intergeneracionales y espacios de intercambio entre mujeres, con la participación de comunidades de los pueblos Murui, Bora, Ocaina, Secoya, Kichwa, Maijuna y Ticuna. Estas reuniones contribuyen a la formación de lazos entre los ancianos y jóvenes, quienes encuentran en estas actividades una forma de aprendizaje y reconocimiento cultural.
Fortalecer la identidad cultural
La iniciativa comenzó como un espacio de acompañamiento para los adultos mayores, quienes, durante la pandemia, compartían el almuerzo con jóvenes del internado y de la comunidad juvenil "Sursum Corda". Estos encuentros, realizados cada sábado, ofrecen una oportunidad para que las nuevas generaciones escuchen y aprendan de las historias y conocimientos de los ancianos. El proyecto se ha convertido en un espacio de intercambio y de revaloración de la identidad cultural para crear vínculos intergeneracionales.
Así como los jóvenes y ancianos, las mujeres también participan de procesos para compartir sus conocimientos. En octubre, el internado organizó el Segundo Encuentro Intercultural de Mujeres Nativas, un espacio en donde ellas compartieron sus saberes ancestrales, sus recetas y su arte. La Hna. Rosa Gómez Chávez, directora del internado, destacó la relevancia de este intercambio: “Es importante que las mujeres nativas tengan un espacio para expresarse y compartir sus conocimientos”.
Diálogo y liderazgo de la mujer
Desde 2022, la parroquia del Vicariato Apostólico San José del Amazonas, en coordinación con la Federación de Comunidades Nativas Fronterizas del Putumayo (FECONAFROPU), organiza los Congresos de la Mujer. En estos espacios, las mujeres también han tenido la oportunidad de dialogar con sabios de la comunidad, quienes, a través de relatos, cantos y danzas, transmiten sus conocimientos ancestrales. Estos intercambios refuerzan el liderazgo de las mujeres desde su cultura y su conexión con la "Casa Común".
Las mujeres traen su artesanía, tejidos, paneros, bolsos, abanicos etc. hechos con fibras naturales y semillas del lugar. Así mantienen vivas sus tradiciones y trasmiten a los jóvenes la riqueza cultural que cada grupo étnico conserva. "Estos encuentros nos ayudan a mantener vivas las costumbres de nuestros ancestros y a fortalecer las raíces étnicas, revalorar la cultura y empoderar a las mujeres, seguir manteniendo viva la memoria y el recuerdo de nuestros antepasados", sostuvo la Hna. Rosa Gómez.