Adiós al cardenal Hummes: La Iglesia amazónica agradece al Dios de la Vida por su legado
La Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) y la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) recordaron los aportes al territorio amazónico y a sus pueblos originarios que dejó el cardenal Cláudio Hummes, fallecido el último lunes 4 de julio a los 87 años de edad. A través de una carta, ambas instituciones agradecieron al Dios de la Vida por su existencia, y expresaron que "su legado y memoria continuarán entre nosotros como organizaciones hermanas que él impulsó con su fuerza, amor y liderazgo", afirmando así su compromiso de continuar construyendo un camino juntos, tal y como siempre él soñó.
"Seguiremos comprometidos con valentía y alegría en el bioma amazónico en la misión de cuidar su ecología integral con mucho amor, inspirados por el Espíritu Santo, en una Iglesia que escucha, honra, camina y respeta las culturas, las identidades y las espiritualidades de las comunidades locales, afrodescendientes, ribereñas e indígenas del área urbana y rural de la región Panamazónica", indicaron en la misiva.
Asimismo, resaltaron el impulso que el cardenal Claudio Hummes les dio para hacer posible una iglesia en salida y para responder a los desafíos del panorama territorial amazónico, como instrumentos de trabajo sinodal y metodología eclesial, donde están presentes en calidad de sujetos también "las personas consagradas, las mujeres y los laicos". "Dom Claudio nos mostró su opción preferencial por la Amazonía y sus pueblos originarios y nos animó a pasar del “deber hacer” al “hacer”, que reconozcamos, valoremos y visibilicemos lo que estamos haciendo y lo que ya se hizo", mencionaron.
En la carta manifestaron también sus deseos de hacer realidad una pastoral misionera que busca renovar la formación y las prácticas de los actores eclesiales, respondiendo a la realización de los sueños de Querida Amazonia. "Confiamos en que la bendición de Dios no nos faltará cuando necesitemos ser una fuerza de resistencia para la defensa de los pueblos y comunidades, de sus derechos y dignidad, para proteger los bosques, los manantiales y la preservación del planeta al cual pertenecemos y es obra de Dios".
"Seguiremos conectados con Dios, fuente de toda vida, y bajo la protección de María, Madre de la Amazonia, cumpliendo los sueños de Francisco de Asís para el bien de toda la Creación, ¡Como tan bien lo realizó nuestro querido hermano, Dom Claudio!"
A continuación, lee la carta de forma íntegra: