A través de un pronunciamiento, pidieron una transición política para buscar una salida a la "profunda crisis actual" y a la lucha interna entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, que daña la democracia generando división y conflicto.

La Conferencia Episcopal Peruana hizo un llamado a todos los sectores de la sociedad civil a buscar por medio de los cauces democráticos "el restablecimiento de la gobernabilidad y la paz" en el país. En medio de lo que calificaron como "un momento de profunda crisis social y política", expresaron que aún se está a tiempo para trabajar juntos tomar rumbo hacia un proyecto de país con un auténtico compromiso para el desarrollo humano integral.

A través del pronunciamiento publicado el jueves 18 de agosto, los obispos del Perú resaltaron que es urgente buscar y constituir canales efectivos de articulación y diálogo entre el Poder Ejecutivo, Legislativo, Judicial y la Sociedad Civil, para garantizar la gobernabilidad y el bien común. "El consenso social pide dar paso a una transición política que busque urgentemente una salida a la profunda crisis actual, priorizando la necesaria reforma política pendiente", agregaron.

Asimismo, apuntaron que es necesario defender la "institucionalidad democrática" y que los gobernantes respeten a los gobernados como verdaderos ciudadanos. "La ciudadanía no merece ver los espectáculos de enfrentamiento en y entre los poderes públicos, especialmente del Ejecutivo y Legislativo, pues la confrontación permanente profundiza su deslegitimación y la ciudadanía ya no se siente representada por ellos. Por el contrario, deben enfocarse en el cumplimiento de la ley y dar testimonio de ello".

Contra la corrupción

En el documento que suscriben los obispos peruanos, se menciona además que "es vergonzoso y decepcionante" que, de acuerdo al informe del Latinobarómetro en 2021, el Perú sea uno de los cuatro países que registran el mayor índice de percepción de corrupción en América Latina. En ese sentido, hicieron énfasis en las palabras del Papa Francisco durante su visita en 2018, cuando dijo que "la corrupción es un cáncer que lo infecta todo” e impacta, a su vez, en el alto índice de la pobreza.

Y es que, para el año 2022, las cifras han alcanzado al 27.5% de la población peruana. De esa manera, "con los "alarmantes niveles de descomposición política, social, económica y moral" se afecta también la vida de las personas en aspectos como la alimentación, la educación y el empleo; a los cuales se unen la desconfianza de un gran porcentaje de la población, la pérdida de credibilidad y de gobernabilidad.

Finamente, la Conferencia Episcopal Peruana instó a las autoridades a enfocarse en el cumplimiento de la ley y a dar testimonio de ello. "Deben facilitar las investigaciones en curso sobre la corrupción que llevan a cabo el Ministerio Público y el Poder judicial", reiterando su compromiso para contribuir a seguir caminando para alcanzar una buena gobernabilidad y el bien común. "La Iglesia Católica, en fidelidad a Dios y a las personas, ha estado, está y estará siempre dispuesta a colaborar por el bien de nuestro querido Perú".