Crimen contra la humanidad y el dilema del «marco temporal» en el contexto panamazónico
La delegación de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) culmina una semana de intensas actividades en el Foro Permanente sobre Cuestiones Indígenas en Naciones Unidas con reuniones claves, entre ellas están la oficina especial para la Prevención del Genocidio, encabezada por Alice Wairimu Nderitu, así como con las misiones permanentes de México y España.
Por: REPAM
Durante estos encuentros, Laura Vicuña Pereira Manso, representante del pueblo Kariri, expuso ante la responsable de la Oficina de Prevención del Genocidio de las Naciones Unidas la situación preocupante del Territorio Karipuna. Manso denunció la reducción de este territorio debido a los impactos de grandes empresas, el avance de la agroindustria y el acaparamiento de tierras, así como el saqueo de recursos naturales. Además, alertó sobre los efectos de la aprobación de la ley 14.701, que legaliza el controvertido concepto del “marco temporal”, causando graves daños físicos, culturales y territoriales a su pueblo y a los pueblos aislados, constantemente amenazados por el genocidio, quienes han sufrido varios procesos de reducción.
A pesar de que el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil declaró la inconstitucionalidad del “marco temporal”, reafirmando los derechos originales de los pueblos indígenas sobre sus territorios ancestrales, el Senado Federal aprobó rápidamente una ley que, en la práctica, ratifica esta doctrina. Según esta ley, los pueblos indígenas solo podrán reclamar territorios que estuvieran bajo su posesión en 1988, fecha de adopción de la Constitución Federal. Esta medida, según críticos y la realidad que viven los pueblos indígenas, estaría incentivando a las invasiones de tierras, a la deforestación y obstaculizando procesos de demarcación de tierras indígenas.
Valexon Lins Oliveira Ambrósio, líder del pueblo y etnia Macuxi, también expresó su preocupación durante el foro. Ambrosio denunció la expulsión de su territorio y de otros pueblos indígenas, así como el saqueo y las amenazas de invasores de tierras. Espera que el Tribunal Supremo de Brasil se pronuncie sobre el pedido de demarcación solicitado desde 2009.
Además, Oliveira destacó otras situaciones preocupantes, como el caso de la comunidad indígena Tierra Indígena Serra da Moça, quien fue engañada para firmar un documento que un tercero intenta interpretar como “una donación”. Otro caso que trasladó fue el de la comunidad indígena Anzol, excluida de la demarcación y cuyos territorios fueron vendidos por el gobierno, considerados hoy como invasores en sus propias tierras.
La ley del “marco temporal” ha generado una serie de conflictos y tensiones en el contexto Panamazónico, poniendo en riesgo los derechos y la integridad de los pueblos indígenas. Los líderes indígenas, como Valexon Lins Oliveira Ambrósio, hacen un llamado urgente para que se demarquen y protejan sus territorios, y se asignen recursos para garantizar su vigilancia territorial y ambiental, en una lucha contra los invasores y la preservación de sus culturas milenarias.