El jueves 28 de abril se realizará el estreno presencial del séptimo capítulo de la serie “La vida por la Amazonía”, que narra la historia de vida de la misionera peruana Sor 'Aguchita'. Amigos y familiares de la próxima beata peruana participarán de este encuentro que se realizará en la ciudad de Lima, y que se enmarca dentro de las actividades previas a la ceremonia de su beatificación.
El próximo 28 de abril se estrenará el documental que narra la vida de la próxima beata peruana, María Agustina Rivas, más conocida como Sor 'Aguchita'. El encuentro, organizado por la Congregación Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor, la Conferencia de Religiosas y Religiosos (CONFER) del Perú, el Vicariato Apostólico de San Ramón y la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) Perú; reunirá a representantes de la Iglesia, religiosos, religiosas, laicos y familiares y amigos de la misionera, en un espacio donde se reflexionará sobre su vida y misión pastoral.
Este material audiovisual forma parte del séptimo capítulo de la serie “La Vida por la Amazonía”, una producción que narra el testimonio de mujeres y hombres mártires que ofrendaron sus vidas en defensa de la Amazonía y sus pueblos; y se estrenará oficialmente como parte de las actividades previas a la ceremonia de beatificación de Aguchita, que se llevará a cabo el próximo 7 de mayo en el centro poblado La Florida, en la provincia de Chanchamayo, región Junín.
En el evento de presentación del documental se contará con la intervención de forma presencial y virtual de Mons. Gerardo Zerdin, obispo del vicariato de San Ramón; Mons. Salvador Piñeiro, arzobispo de Ayacucho; Hna. Marlene Acosta, de la Congregación del Buen Pastor, Hna. Gisela Reich, vocal de la junta directiva de la CONFER; P. Julio Caldeira, coordinador de comunicación - secretaría ejecutiva de la REPAM; Teresa Chuquizuta, sobrina de Aguchita, entre otros misioneros y misioneras que contarán sobre cómo la próxima beata peruana les inspira en la vida, en la Iglesia peruana y la sociedad.
‘Aguchita’, de la comunidad del Buen Pastor, fue asesinada por Sendero Luminosoel 27 de septiembre de 1990, mientras desarrollaba su misión pastoral con el pueblo Asháninka, en la selva central del Perú. Su beatificación fue aprobada por el Papa Francisco el año pasado, luego de que la Congregación para las Causas de los Santos reconociera el martirio de la Sierva de Dios.
María Agustina Rivas consagró su vida a la asistencia en salud, educación, ofreciendo alimentos y alfabetizando principalmente a mujeres. En medio de la violencia que azotaba el país, en 1987, la religiosa tomó la decisión de viajar a la localidad de La Florida, en la región Junín. Allí se dedicó a educar y ayudar a las mujeres del campo, enseñándoles actividades como rezar, tejer y cocinar.
Sobre el documental
El mediometraje, que cuenta con una extensión de 25 minutos, recoge los testimonios de quienes conocieron a Sor Aguchita en los tres principales lugares en los que vivió. En Lima, con las religiosas del Buen Pastor; en Coracora, su ciudad natal, para conocer el contexto donde nació e inició su vínculo con la Iglesia; y también en la selva central; lugar en el que dedicó sus últimos años a la educación de los jóvenes asháninkas y a apoyar a las mujeres del campo. Su elaboración estuvo a cargo de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) y la Asociación Católica Latinoamericana y Caribeña de Comunicación (SIGNIS ALC), bajo la producción de TeleAndes Producciones.
¿Qué tienen en común la nueva beata peruana, una sencilla religiosa de los andes peruanos, con el Papa Francisco, nacido en la capital de Argentina?
Por: P. Luis Alfonso Tapia Ibañez
La base común que todos compartimos es el Espíritu Santo recibido en el bautismo. El mismo Espíritu soplaba en su interior y les invitaba a ser fieles a la voluntad de Dios en sus vidas. Y este mismo Espíritu inspiró el acontecimiento eclesial más importante de este último siglo: el Concilio Vaticano II, imprescindible para comprenderlos a los dos.
El Papa Francisco nos presentó su “proyecto pastoral” en la Exhortación Apostólica “Evangelii gaudium”, heredera del Vaticano II, de la exhortación Evangelii Nuntiandi” de san Pablo VI y del documento conclusivo de Aparecida.
El papa soñaba con una iglesia en salida misionera, pedía a los cristianos ser “callejeros de la fe”. Y ahí tenemos a nuestra Aguchita escapándose, - terminadas sus responsabilidades oficiales-, para salir a buscar a las mamás de un club de madres para organizarles talleres, enseñarles a tejer, cocinar, leer la biblia y hacer catequesis. Escapándose también a conversar con aquellas señoras amigas que tenían problemas en su casa, una con el esposo violento o alcohólico, con el hijo drogodependiente, otra porque no le alcanza la plata, aquella porque tiene la hija enferma y un larguísimo etcétera. Busca a enfermos, mujeres, jóvenes y familias a quienes socorrer, alentar y acercar a Dios.
Será callejera de la fe cuando vaya al caótico y peligroso mercado mayorista de la Parada, en Lima. Para todos tiene una palabra de aliento, una pregunta por su salud, su familia, el trabajo, el “problemita” que le contó la otra vez y por el que sigue rezando hasta ahora.
El Papa Francisco sueña también con “una iglesia pobre para los pobres”. Aguchita no hablará de “opción preferencial por los pobres”, pero sabe perfectamente que “lo que a uno de estos pequeños hicieron, a mí me lo hicieron” y ha hecho esta opción desde que vivía en Coracora. Nació pobre por cuna y vivió pobre por opción: dedicó todo su pastoreo al servicio de los pobres para ofrecerles una vida más digna y llevadera, donde Dios ocupe el lugar principal.
No hablará de “pastores con olor a oveja”, pero será ese amor que le quema en el corazón lo que la llevará a buscar a señoras y niñas, jovencitas y clubes de madres, familias y esposos, hijos y sobrinos, colonas y nativas, terroristas y militares, sin importar el día, ni la hora, la edad o la salud. Todas son sus ovejas, encargadas con amor por su Amado Buen Pastor, por ellas dará su vida. Primero día a día, y un 27 de setiembre la dará para siempre, para todos.
Una mirada que entiende
En el 2015, veinticinco años después de la muerte de Aguchita, el Papa Francisco nos regala la encíclica social “Laudato Si”, invitándonos al cuidado de la casa común. Aguchita no hablará de “ecología” y menos de “ecología integral”, pero lo vivirá como fruto de una mirada contemplativa que sabe ver al Amado en todo, en todos, siempre. Una mirada que entiende, con el Génesis, que todo es fruto del amor de Dios y como todo regalo, cargado de afecto, debe ser utilizado y cuidado con cariño y esmero. Sabrá sacar partido de todo lo que el Padre nos regala por medio de la creación, con la que disfruta como una niña; y enseñará a señoras, jóvenes y niñas a aprovecharlo al máximo, porque para eso nos lo ha regalado Dios.
Y, precisamente, por ser un regalo amoroso del Padre, hemos de cuidarlo y evitar que se malogre o deteriore. Será recicladora creativa, reinventora de recetas para aprovechar los ingredientes que tenemos, sembradora de todo lo que pueda producir, técnica agropecuaria que saca pesticidas naturales, composteras, reutilizadora de todos los recursos a la mano. Y, sobre todo, enseñará a encontrar a Dios en la naturaleza, a disfrutar con una puesta de sol, el vuelo de los pájaros, grandes o pequeños, mariposas y cualquier volátil que se deje ver, a disfrutar con la siembra y la cosecha, las flores y los frutos, los enormes árboles de la selva y las pequeñas orquídeas solo visibles a ojos expertos y curiosos. Y lo más hermoso, lo más precioso de la creación, la niña de los ojos de Dios: el ser humano, en su grandeza y debilidad. La vida a su lado era un cielo anticipado, gracias a su mirada contemplativa.
El mismo año, el Santo Padre nos regala con el “Año de la Misericordia”, dimensión esencial de la Congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor a la que pertenece Aguchita y que vivió toda su vida. El título de su primera biografía será: “Mártir de la Misericordia”
Al lado de las mujeres y las familias
En 2014 y 2015 el Papa convocó dos sínodos sobre la familia, publicando al año siguiente la Exhortación Postsinodal “Amoris laetitia”, sobre el amor en la familia, invitando a la atención personalizada a las familias, parejas y novios, caminando juntos, evitando soluciones mágicas que no van al fondo del problema. Aguchita dedicó muchas horas a escuchar a las familias derrochando cariño y paciencia para ayudarlos y acompañarlos, conversando con padres e hijos, con la esposa y el esposo, juntos o por separado, además de llevarlos en su corazón a la oración con Dios. Insistía a las mamás diciéndoles que ellas son las mejores maestras de sus hijos. Se preparó durante toda su vida para ayudar a esas familias a salir adelante, a superar problemas de pareja, económicos, con los hijos, de salud… Su ingrediente secreto será el amor.
En el 2018, un nuevo Sínodo y su Exhortación posterior “Christus vivit”, nos invita también a hacer camino con los jóvenes, a escucharlos y acompañarlos en sus procesos Toda su vida de religiosa, Aguchita, trabajó con jóvenes, en el internado, con madres gestantes y adolescentes, con las jóvenes religiosas, con el grupo juvenil en La Florida; siempre mostrando tacto y paciencia para sacar de ellos lo mejor.
En la fiesta de San José, del 2018, el Papa Francisco nos sorprende con la Exhortación Apostólica “Gaudete et exsultate” sobre el llamado a la santidad en el mundo actual. En este caso “la Santa de la puerta de al lado” y la “clase media de la santidad”; cita en concreto “la religiosa anciana que sigue sonriendo”. Y en el Capítulo Cuarto, titulado “Algunas notas de la Santidad en el mundo actual” parece que hace una descripción de la vida de Aguchita: aguante, paciencia y mansedumbre; alegría y sentido del humor; audacia y fervor; en comunidad; en oración constante.
Nos ayuda el Papa a comprender que Aguchita no es una estrella fugaz en medio del firmamento de la Iglesia, solitaria; sino que ha sido levantada por Dios, utilizando a Sendero Luminoso, para mostrar un ejemplar de los miles de miles que existen de esa “clase media de la santidad”. Así, su beatificación es la beatificación de miles de religiosas y de cientos de miles de madres de familia, que, como ella, han entregado su vida, día a día; han vivido su vida, como Jesús nos enseñó en la Última Cena, sirviendo a los pies; pero no como esclavas, sino como reinas, amadas y buscadas por todos, porque todos sabemos que podemos contar con ellas para lo que sea. Como lo hizo María y lo hizo San José de quienes era tan devota. No por casualidad, en el año de San José, fue aceptada su muerte como martirio. Y, al igual que en su vida en la tierra, donde daba preferencia a los enfermos, también desde el cielo esperó un año más para su beatificación, preocupada por los muchos enfermos del Covid.
En estos últimos años, la Iglesia universal se ha “amazonizado”; y también en esto Aguchita se adelantó. A los 68 años cumplió su sueño de ser misionera en la selva, trabajó con dos pueblos originarios, asháninkas y yaneshas, y dio su vida en la Amazonía.
Por último, no podemos obviar otra pasión y preocupación conjunta de Francisco y Aguchita: los sacerdotes. Ambos han conocido las glorias y las miserias de muchos sacerdotes, aunque desde puntos de vista muy distintos. Ambos fueron apoyados por sacerdotes para discernir su vocación, ambos han sufrido contemplando las miserias de muchos sacerdotes, ambos aman, oran y sirven a los sacerdotes.
Es el Espíritu Santo quien guía su Iglesia y estos ejemplos nos permiten comprobarlo, fortalecer nuestra pobre fe y afianzar nuestra frágil esperanza.
Gracias Señor por Francisco y Aguchita, por tu Iglesia y por permitirnos formar parte de ella.
Con el objetivo de generar reflexiones sobre el cambio climático y caminar hacia una ecología integral junto a los pueblos indígenas, la Conferencia de Religiosas y Religiosos del Perú (CONFER) y la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) Perú organizan este espacio de aprendizaje que se llevará a cabo todos los lunes a partir del próximo 25 de abril.
Ante el pedido del Papa Francisco de profundizar sobre las reflexiones que giran en torno a la Encíclica Laudato Sí', la Comisión de Ecología (JPIC) de la Conferencia de Religiosas y Religiosos del Perú (CONFER) y la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) Perú abrieron las inscripciones para el seminario virtual “Custodios de la Casa Común: un recorrido por los contenidos de Laudato Si'". Este espacio de aprendizaje de ingreso libre abordará, durante diez sesiones, cada uno de los capítulos de este documento de la mano de especialistas y misioneros que, a través de sus experiencias en diferentes escenarios y perspectivas, ayudarán en la reflexión de este tema.
El seminario se desarrollará todos los lunes desde el próximo 25 de abril hasta el 27 de junio, en el horario de 7:00 a 9:00 p. m. ; y estará dirigido a congregaciones, iglesias, parroquias, movimientos laicales, religiosas y religiosos, y toda persona interesada en el cuidado de la Casa Común y en emprender acciones para la sostenibilidad del planeta junto a los pueblos indígenas. “Es una oportunidad para asumir líneas de acción concretas tanto en nuestra pastoral como en nuestra vida espiritual. La pastoral hoy nos exige nuevas formas de diálogo, esto implica escuchar el grito del pobre pero también escuchar el grito de la tierra”, indicó el Padre Roberto Carrasco, miembro de la Comisión de Ecología (JPIC).
Esta actividad también brindará los criterios para poder enfrentar situaciones como el cambio climático, la desforestación, las guerras, los procesos de contaminación que sufren las aguas de los mares, de los océanos y de los ríos; y enfocar una mirada particular a los bosques amazónicos y a las cordilleras. Además, llevará a los participantes a formar parte de la Plataforma de Acción Laudato Si’ del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, un espacio para que las instituciones, las comunidades y las familias aprendan y crezcan juntas mientras caminan hacia la plena sostenibilidad en el espíritu holístico de la ecología integral.
Este seminario se realiza por primera vez en la CONFER Perú. Es por esa razón que se cuenta con la participación activa de misioneros y representantes de los Vicariatos de la selva del Perú, quienes podrán ahondar con mayor profundidad sobre sus experiencias con los pueblos indígenas en la defensa de la biodiversidad. En ese sentido, para la inauguración de “Custodios de la Casa Común: un recorrido por los contenidos de Laudato Si' se contará con la participación del Card. Pedro Barreto, arzobispo de Huancayo, presidente de la REPAM y presidente de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA), quien brindará una introducción sobre esta Encíclica.
Cabe resaltar que este espacio también será transmitido a través del Facebook Live de Querida Amazonía - REPAM Perú y la CONFER Perú. Además, las personas que se inscriban y asistan a las 10 sesiones del seminario por la plataforma Zoom recibirán un certificado por 30 horas lectivas.
La Parroquia Virgen de Fátima – una de las 48 obras de Misión Jesuita-, en Santa María de Nieva, Amazonas, impulsa diversas iniciativas que buscan reforzar la formación de sus catequistas y promotores de la fe, llamados también “etsejin” (en lengua awajún) o “etserin” (en lengua wampi). De modo particular, tienen un proyecto para reforzar la formación y la acción pastoral de 40 etsejin para una iglesia interculturada e intercultural en la Amazonía Peruana.
Este proyecto evangelizador tiene como actor principal al ‘etsejin’, figura desconocida para muchos. Sin embargo, es uno de los pilares más fuertes del trabajo jesuita en las comunidades rurales de la provincia de Condorcanqui, en Amazonas.
La selva del Alto Marañón, atravesada por ríos y conformada por amplios bosques amazónicos, representa un espacio de gran biodiversidad, pero de difícil acceso. Con ríos y quebradas como principales vías de comunicación, cuenta con setenta y cinco mil habitantes, de los cuales el 90% pertenece a las tribus indígenas awajún y wampís.
Estos grupos étnicos, con lengua y cultura propia, poseen una cosmovisión diversa y rica, pero, con el tratamiento incorrecto, pueden verse excluidos de la acción pastoral. Para hacerle frente a ello, se abre paso el etsejin, el agente comunicador, el nexo. Aquella figura que acorta las fronteras culturales.
Tras los últimos dos años de pandemia que dificultaron el acceso a las comunidades, la labor de los catequistas indígenas se está retomando. A través de su formación, visitas periódicas y la difusión del mensaje de Jesús, los etsejin brindarán un mejor y renovado acompañamiento espiritual y emocional a las familias afectadas por la COVID-19.
Más ampliamente, el proyecto busca desarrollar la pastoral y espiritualidad local, de la mano de 40 etsejin nativos, 60 comunidades nativas, 7 caseríos hispanohablantes, 10 catequistas hispanohablantes y 19 capillas. Se busca una formación espiritual e intercultural adecuada que haga posible auténticos etsejin.
En palabras del P. Carlos Quintana, SJ, Superior Jesuita de la zona: “La capacitación que se proyecta tanto para los etsejin y agentes de pastoral, las visitas misioneras a las comunidades y los talleres descentralizados son las estrategias para responder a la llamada del Sínodo de la Amazonía y a la propuesta de las Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía de Jesús.”
Por supuesto, potenciar el trabajo de los etsejin no solo permite crecer o transformar la vida espiritual de las tribus awajún y wampís, ya sea a través de una celebración de la fe en comunidad, intercultural, sino que está sentando las bases para una transformación real hacia una iglesia con rostro amazónico
____________________________
Nota publicada originalmente en la web de Misión Jesuita. Se puede leer aquí.
El papa Francisco ha declarado ‘venerable’ a Martino Fulgenzio Elorza Legaristi, prelado de origen español y quien en vida fuera titular de Moyobamba.
Por: Ángel Morillo – Vida Nueva Digital
La Conferencia de Obispos de Perú anunció que el papa Francisco ha declarado ‘venerable’, este 9 de abril, a Martino Fulgenzio Elorza Legaristi, prelado de origen español y quien en vida fue titular de la jurisdicción amazónica de Moyobamba, departamento de San Martín.
El Santo Padre autorizó a la Congregación para las Causas de los Santos “promulgar el decreto de las virtudes heroicas del Siervo de Dios”.
De este modo, Elorza inicia el camino a los altares que comienza con esta etapa, luego sigue la beatificación con un primer milagro comprobado y, finalmente, la canonización con un segundo milagro.
Perfil del nuevo venerable
Sobre el nuevo Venerable, la Conferencia de Obispos ha indicado que “nació en España el 30 de diciembre de 1899. Fue una de las figuras más importantes de la Congregación Pasionista en el Perú”.
Estuvo encarnado en la Amazonía peruana, donde promovió la educación y la formación de comunidades indígenas.
“En 1953, a la edad de 49 años, fue nombrado Obispo Titular de Baliana y Primer Obispo Prelado de Moyobamba. Durante los 17 años de su Ministerio Episcopal viajó incansablemente a lo largo y ancho de la selva, visitando todos los rincones de la prelatura”, apuntaron.
Asimismo fomentó la construcción de “muchos lugares de culto y escuelas” para superar el analfabetismo en adultos y la catequesis inculturada.
De hecho, durante la celebración del Concilio Vaticano II “defendió el uso de las lenguas originarias por parte de la Iglesia”.
A continuación, el comunicado de Mons. Rafael Escudero López-Brea, actual obispo Prelado de Moyobamba:
En el contexto de la elección de la nueva presidencia del CEAMA el pasado 27 de marzo, el Nucleo de Mujeres de la REPAM lanza una declaración a fin de contribuir en la construcción de una Iglesia cada vez más sinodal, participativa y con un rostro amazónico desde sus instancias organizativas.
Por: Núcleo de Mujeres
Representantes del Núcleo de Mujeres de la Amazonía, ante la confirmación de la nueva presidencia de la Conferencia Eclesial de la Amazonía – CEAMA, lanzan un comunicado para expresar su “perplejidad, tristeza e indignación” al no ver la representatividad femenina de la Iglesia con rostro amazónico en la institución.
Considerando que la CEAMA fue creada para promover una Iglesia con rostro amazónico y sinodal, la ausencia total de mujeres en la presidencia, manifiesta una falta de valoración y reconocimiento efectivo del ser mujer.
Este clamor de las mujeres busca contribuir a la reflexión y construcción efectiva de una Iglesia cada vez más sinodal, participativa y con rostro amazónico desde las instancias organizativas de la Conferencia Eclesial de la Amazonía.
"A partir de ahí, para una conversión pastoral y eclesial, proponemos la creación de una presidencia ampliada con la participación de las mujeres y de los pueblos indígenas y otros pueblos amazónicos (campesinos, habitantes urbanos, comunidades tradicionales, ribereños) en los órganos de gobierno de la CEAMA”.
A continuación, lee el pronunciamiento de forma íntegra:
En la mesa de diálogo de la exposición «Puedo caminar, puedo volar. Artistas amazónicas contemporáneas y la defensa del buen vivir», cuatro mujeres expresaron las historias, inspiraciones y vivencias que buscan plasmar en su arte. Pidieron que, desde las organizaciones de la sociedad civil y el Estado se fomente la creación de más espacios de difusión para las creadoras amazónicas.
Por: Querida Amazonía
Cuatro mujeres indígenas, pertenecientes a los pueblos harakbut, shipibo-konibo, yanesha y awajún-wampís; dieron a conocer su quehacer artístico, vivencias y particulares miradas como creadoras en la mesa de diálogo de la exposición "Puedo caminar, puedo volar. Artistas amazónicas contemporáneas y la defensa del buen vivir", que se desarrolló el pasado 30 de marzo en el Museo Metropolitano de Lima.
Yésica Patiachi, artista y educadora harakbut; Dina Ananco, poeta awajún-wampis; Chonon Bensho, artista shipibo-konibo y Medalith Ruffner, artista yanesha; mujeres que, con esfuerzo y tesón han logrado participar activamente en los ámbitos políticos, literarios, artísticos e intelectuales de la sociedad; explicaron las ideas detrás de su arte en pintura, bordado, cerámica, tejidos y arpilleras.
La mesa de diálogo inició con la experiencia de Medalith Ruffner, proveniente de la comunidad de Shiringamazu, en Oxapampa (Pasco), quien compartió la historia de creación de la Asociación de artesanos del Alto Purús. Mediante este arte, contó, se ha logrado el desarrollo económico de mujeres en distintas comunidades y la revaloración de su identidad cultural.
Medalith, como una de las lideresas e impulsoras de esta organización que empezó con cuatro miembros, se dedica a capacitar a mujeres, jóvenes y niños en la elaboración de bisutería con semillas naturales, teñido de telas con fibras vegetales, elaboración de juegos ancestrales y de vestidos con iconografía yánesha. Elementos que evocan su forma vivir en el bosque, en la chacra, en el río.
"Ahora somos más de 10 mujeres que salimos todas las festividades llevando nuestra artesanía. También hemos tenido la oportunidad de participar en las ferias nacionales, y estamos mejorando la calidad de nuestra artesanía. Hoy, las mujeres que nos rechazaban antes les dicen a sus esposos que solo un día les ayudarán en la chacra, y que los demás días se dedicarán a la artesanía", manifestó la artista yánesha.
La artistas shipibo-konibo shonon Bensho, ganadora del XII Concurso Nacional de Pintura del BCRP con su obra con patrones kené "El río de los perfumes medicinales", agradeció este espacio organizado por el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica, la Red Eclesial Panamazónica en Perú (REPAM Perú) y la Municipalidad de Lima, para poder exhibir sus obras y las obras de tantas mujeres amazónicas.
Por otra parte, la poeta awajún-wampis, Dina Ananco, resaltó el impacto que muchas mujeres de la Amazonía han dejado en ella. Ellas, en su búsqueda de oportunidades, abren paso a las mujeres en sectores como la política, la comunicación y el arte. Enfatizó que, a pesar de que aún hay mucho por recorrer, al fin se ha puesto en marcha este camino.
"Creo que todas las mujeres originarias que venimos acá, hayamos estudiado en la universidad o no, poseemos ese conocimiento que nuestros sabios o sabias nos han transmitido. Y esa es una base de conocimientos que nosotros podemos expresarlo ahora en el arte (...) No digo que tengamos el espacio ganado y que no haya nada más que trabajar, sino que estamos encaminándonos", sostuvo la poeta Dina Ananco.
Por último, Yésica Patiachi, artista harakbut, educadora y escritora de la región Madre de Dios, narró las dificultades que las mujeres deben afrontar en sus comunidades indígenas, indicando que muchas veces sus trabajos son menospreciados o invisibilizados. Contó que, a través del colectivo "Etochime Harakbut", iniciativa impulsada por el pueblo harakbut, se busca rescatar sus valores culturales y su lengua mediante el arte, debido a la amenaza cultural que representa la minería ilegal en esta parte de la Amazonía.
"Como dijo el Papa Francisco, los pueblos indígenas de la Amazonía somos protagonistas de muchas injusticias, incluida la mujer. Cuando yo publiqué mi primer libro casi nadie de mi pueblo me felicitó, porque la primera publicación que se hacía en la lengua harakbut lo hacía una mujer. Sabía que de alguna u otra forma la publicación rememoraba la historia de tantas abuelas que me habían contado estos relatos", señaló Yésica.
Las artistas indígenas expresaron que esperan que más espacios como estos puedan ser apoyados desde el Estado y las organizaciones de la sociedad civil. Resaltaron que el talento no falta, sin embargo, faltan espacios para demostrarlo. En ese sentido, expresaron que se debe aprovechar que la mujer tiene una sensibilidad única de transmitir y de darle color a la ciudad.
"Puedo caminar, puedo volar"
Son 26 artistas de seis pueblos indígenas las que participan en esta exposición, que será exhibida hasta el próximo 29 de mayo en la Galería Limaq. Un espacio en la capital que abre una mirada a la Amazonía desde la perspectiva femenina y que pone en relevancia los diversos roles y conocimientos que tienen, expresados a través del arte. Del mismo modo, esta muestra busca generar un espacio de reflexión en torno a temas aún pendientes en el ejercicio de su ciudadanía.
La muestra se puede visitar hasta el 29 de mayo en la Galería Limaq del Museo Metropolitano de Lima (Av. 28 de Julio 800, Cercado), de martes a domingo, de 10 a.m. a 1 p. m. y de 2 a 6 p. m. Los domingos estarán también algunas de las artistas ofreciendo al público la posibilidad de comprar sus artesanías.
La Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) se reunió en su Asamblea Ordinaria el 26 y 27 de marzo para elegir a su nueva presidencia para los próximos cuatro años, que será liderada por el Cardenal Pedro Barreto, actual Arzobispo de Huancayo en Perú y presidente de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM). Siguiendo los deseos del Papa Francisco por una Iglesia con rostro amazónico, el reto es que no solo la cultura, sino la espiritualidad de la Amazonía esté presente en esta misión junto a los pueblos y las comunidades, señaló el nuevo presidente de la CEAMA.
El Card. Pedro Barreto, Arzobispo de Huancayo (Perú) y también presidente de la Red Eclesial Panamázonia (REPAM), fue elegido presidente de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA), cargo que ocupará durante los próximos cuatro años. La decisión se tomó durante Asamblea Ordinaria, realizada el 27 y 28 de marzo; tras la renuncia del Cardenal Claudio Hummes y los demás miembros de la presidencia.
Como primer vicepresidente fue elegido Mons. Leonardo Steiner, arzobispo de Manaus (Brasil), y como segundo vicepresidente a Mauricio López, coordinador del Centro de Redes y Acción Pastoral del CELAM (Ecuador). Mons. Eugenio Coter, obispo de Pando (Bolivia), fue ratificado como representante de los Obispos Amazónicos en la presidencia de la CEAMA.
Durante la reunión se reflexionó sobre el camino que se viene realizando en los últimos años; y se presentó un plan para la reforma de los Estatutos que contribuyan a fortalecer y consolidar la CEAMA desde el espíritu de la sinodalidad, de la Asamblea Eclesial y como servicio a las jurisdicciones eclesiásticas de la Amazonía.
"Los desafíos de la Amazonía son parte también de la CEAMA, y definitivamente están marcados por la concepción de la evangelización en la región Amazónica, pero desde dos realidades importantes: la Conferencia Eclesial de la Amazonía y la Red Eclesial Panamazónica .Podemos decir que estos desafíos consisten en hacer un plan conjunto para toda la Amazonía", sostuvo el Card. Pedro Barreto.
En ese sentido, expresó que otro de los retos presentes son la realización de un plan pastoral, y que los Núcleos Temáticos de la CEAMA se puedan compartir con la REPAM. "Tenemos que ir haciendo un enclave territorial, es decir, entrar a esta propuesta definitivamente en el territorio. La REPAM nos ayuda en ese aspecto porque tiene esa responsabilidad. ", agregó.
Por otro lado, señaló que lo que se busca es continuar con el deseo del Papa Francisco para que la Iglesia tenga un rostro amazónico. "Esto quiere decir que no solamente la cultura amazónica, sino la espiritualidad esté presentes en nuestra vida y en nuestra misión. Y aquí tenemos un grave reto de cómo incorporar también a los pueblos y comunidades originarias en este proceso evangelizador que como Iglesia tenemos que realizar", mencionó.
El Cardenal reiteró la intención de continuar con el proceso de escucha de los hermanos y hermanas de la Amazonía, y también al gemido de la tierra. “La nueva presidencia esta avocada no solo a continuar el proceso sinodal, sino a ir respondiendo desde los Núcleos Temáticos a esta problemática muy grave, que como sabemos no solo es la crisis sanitaria, sino la climática que viene afectando gravemente al territorio amazónico con una creciente deforestación y una actitud lesiva a los pueblos originarios y a todos los que viven allí", puntualizó.
Por: P. Manolo Berjón O.S.A y Mons. Miguel Ángel Cadenas
Hace años que nos vienen preguntando si rezar y orar significan lo mismo. La respuesta ha sido siempre idéntica: son sinónimos. Es decir, significan lo mismo. Sin embargo, desde hace un tiempo, recurrentemente, venimos dándole más vueltas. Manolo siempre insiste, y creo que lleva razón, que en Loreto estos dos términos tienen connotaciones diferentes. Pero vayamos por partes.
Rezar proviene del latín ‘recitare’, leer en voz alta. Donde tenemos el reiterativo ‘re-‘, y ‘citare’ (citar, poner en movimiento nombrando a alguien), frecuentativo de ‘ciere’: poner en movimiento, hacer venir con una llamada. Es, por tanto, un verbo de movimiento. Orar se deriva del latín ‘orare’ para expresar hablar, hablar en público o voz alta. Etimológicamente, por tanto, ambas significan hablar en voz alta. Sin embargo, en el lenguaje cotidiano orar suele referirse a una oración en silencio y rezar a una oración en voz alta.
En cambio, y esto es lo interesante, en Loreto posee otra connotación. En este caso traemos a la palestra lo que en tantas ocasiones hemos escuchado por el bajo río Marañón, extensible a todo Loreto. Rezar es utilizar oraciones ya fijadas, fórmulas que se repiten una y otra vez. Por ejemplo, el Padre Nuestro, Ave María... Mientras que orar brota del corazón.
De esta manera, en el bajo Marañón no hay distinción si el rezo/oración es en voz alta o baja. La cuestión deviene en si se utilizan fórmulas ya consagradas o desde el corazón. Y esto merece una breve consideración.
El corazón, para el pueblo kukama del bajo Marañón y otros pueblos indígenas, es la sede del pensamiento-sentimiento. El corazón bombea la sangre y disemina los conocimientos y los aprendizajes por todo el cuerpo. Lo que sale por nuestra boca, y nos referimos al habla, está controlado. No se dice todo lo que se piensa ni se siente. La persona reserva en su corazón lo que le pertenece únicamente a él/ella, y no se pronuncia con la boca. En el habla filtramos lo que queremos decir. En cambio, del corazón sale el canto sin ninguna restricción. De ahí que sea tan importante cantar.
Si la oración brota del corazón, entonces, nos dirigimos a Dios sin ninguna barrera, sin restricciones. Es una oración cordial. El inconveniente: podemos estar tan ocupados en decirle a Dios lo que queremos que no le escuchemos a Él. Pero, sin duda, la oración cordial ha sido y sigue siendo muy apreciada en la Iglesia.
El rezo de fórmulas ya establecidas como el Padre Nuestro, el Ave María… también tiene su importancia. Lejos de ser algo que se repite sin pensar lo que decimos, encontramos varias ventajas: 1.- Nos permite crear una costumbre, un hábito, porque podemos repetir continuamente. 2.- En el caso del Padre Nuestro corresponde al deseo y las palabras del mismo Jesús. El Ave María está inspirado en palabras sobre la Virgen María en el evangelio de Lucas. En este sentido nos da la oportunidad de situarnos en la perspectiva de Dios. Este cambio de perspectiva (ponernos en el lugar de Dios) es sumamente interesante en la Amazonía. Nos permite valorar más y mejor nuestra propia tradición eclesial.
Dedicado a las Carmelitas del Monasterio de la Inmaculada y San José de Iquitos que el 23 de marzo de 2022 cumplieron 10 años en el Vicariato Apostólico de Iquitos. Con todo el afecto para personas que rezan/oran continuamente por la Iglesia.
El Monasterio de Carmelitas está situado en la Av. Abelardo Quiñones N° 1903, distrito de Belén, Iquitos.
Desde el 13 al 19 de marzo se ha desarrollado en Indiana la Asamblea Vicarial 2022. Tres años después de la última Asamblea (que tuvo lugar en marzo de 2019), existía un gran deseo de encuentro, trabajo conjunto, convivir y compartir. Se dieron cita en torno a 70 participantes entre misioneros y delegados laicos de los 16 puestos de misión del Vicariato y la sede de Punchana.
Los dos días previos al domingo 13 tuvo lugar el Encuentro de Misioneros nuevos (llegados al Vicariato en los últimos cuatros años), que contó con excelentes ponentes como el P. Fernando Flórez, la profesora Levis del Águila y el sr. José Álvarez. Resultó una magnífica introducción a la Asamblea, momento clave de la vida y misión del Vicariato.
La tarea que ha vertebrado estos días de trabajo ha sido avanzar en el proceso de elaboración del Plan Pastoral, comenzado hace dos años, durante la pandemia. Para ello hemos contado con la ayuda de los facilitadores Henry Vasquez y Mayte Galarreta, miembros de la asociación Kairós, de Lima, especializada en el acompañamiento a instituciones de la Iglesia.
Los trabajos de estudio de los documentos emanados del Sínodo para la Amazonía (El Documento Final y la exhortación apostólica "Querida Amazonía"), de recogida de datos para el Marco Situacional, elaboración del Propósito (Misión, Visión y Valores del Vicariato) y propuesta de objetivos estratégicos, indicadores y estrategias centraron buena parte de los esfuerzos de los participantes durante la semana. Con gran entusiasmo y en medio de un ambiente de alegría y expectativa de futuro se fueron sucediendo los bloques matutinos y vespertinos.
El retiro, dirigido por el obispo de Iquitos, Mons. Miguel Ángel Cadenas y por el Padre Manolo Berjón; los talleres en torno a temas prácticos (funciones del responsable de puesto, criterios de catequesis, despacho parroquial, cómo poner en marcha el consejo de pastoral), y las informaciones acerca de la economía vicarial y otros sectores de la misión fueron muy valorados por los participantes. De igual manera las actividades nocturnas: danza amazónica, taller de pintura, manualidades, cine... fueron momentos en que realmente se disfrutaron.
El día sábado 19, fiesta de San José, fue empleado en buena medida en sacar adelante la programación vicarial para este año 2022, el calendario de actividades por áreas pastorales y el cronograma de tareas de aportes al Plan Pastoral. En la noche, la celebración de la Eucaristía fue la expresión de fe de esta singular experiencia sinodal que es la Asamblea; en ella, el obispo Mons. José Javier Travieso renovó el envío de los misioneros y agentes de pastoral de nuestra Iglesia vicarial.
La noche cultural sirvió de perfecto colofón a una Asamblea que no se olvidará en años. El ambiente de fiesta y celebración, expresión de lo que se vivió, acompaña a los participantes en su retorno a los distritos y comunidades, donde la misión continúa de manera renovada con el sueño de una Iglesia con rostro amazónico.